FOTO: Flickr Antony Kelly
Sentada en una terraza, en la mesa de al lado adultos con criaturas que se impacientan, reclaman atención y ¡Palabra mágica! "Toma el móvil y juega". La criatura coge la maquinita, se sienta y se concentra en silencia, dejando en paz a los adultos que le acompañan... al fin un poco de paz.
¿De verdad?